PUBLICADO EL : 17/07/2022

¿No sabes por dónde empezar a prepararte para la lactancia materna? ¿Tienes dudas? ¿Temores? Esta mini-guía te ayudará a poner las cosas en perspectiva. Resumimos la experiencia de la lactancia materna y la mejor forma de prepararte para ella en cinco pautas clave.

Recuerda: estas son pautas básicas que te servirán como una guía, más no recomendaciones médicas. No olvides consultar cada decisión que tomes con tu ginecólogo y pediatra.
Prepárate con esta check-list para ir al hospital

1.-Asesórate con especialistas
Quizás te resulte extraña y hasta un poco absurdo la idea de tener que contratar a una persona profesional para que te guíe en algo que siempre has creído que debe fluir de manera natural. Y sí, algo de razón podrías tener; la lactancia es un acto natural y debe vivirse de esa manera. Sin embargo, el hecho de que sea exitosa depende de varios factores que son más complejos de lo que parece.

Hay ciertas cosas que debes tomar en cuenta si lo que quieres es alimentar a tu bebé con el pecho, sobre todo si tu objetivo es que se alimente exclusivamente con leche materna, al menos hasta sus primeros seis meses de vida y como complemento hasta los dos años, que es lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud. https://www.salud.gob.ec/lactancia-materna/

Hay muchos factores que se deben tomar en cuenta para lograr una lactancia materna exitosa. Primero debes tomar en cuenta la forma de tus pezones y si a tu bebé le será fácil la succión. En segundo lugar, debes tomar en cuenta la forma en la que acercas a tu bebé a tus pechos. Existen técnicas específicas para escoger la posición adecuada en la que el bebé tendrá un mejor agarre y podrá no solo succionar, sino también tragar la leche materna de manera fácil, confiable y cómoda.

También debes tomar en cuenta cada cuánto tiempo vas a alimentar a tu bebé. Hay personas que optan por despertar a su niño o niña para que puedan alimentarse cada dos o tres horas, mientras que otros especialistas sugieren alimentarlo a demanda; es decir cada vez que el bebé tenga hambre y lo pida, más allá de cuántas horas pasaron entre toma y toma y sin necesariamente despertarlo para hacerlo.

Todas estas técnicas, dudas, métodos y puntos de vista pueden influir en que logres tener una lactancia agradable o no. Es por eso que es recomendable que busques una especialista en lactancia al menos tres semanas antes de tu fecha de parto, pero que, sobre todo, lo consultes también con tu pediatra, antes del parto.

Una vez que tengas claro cómo te vas a manejar con tu lactancia, es también recomendable que te acerques a especialistas en productos de lactancia, como en este caso Bebemundo. Al acercarte a cualquiera de nuestras tiendas puedes pedir asesoría en productos de lactancia y ver exactamente qué necesitas, qué opciones tienes, y comparar distintos rangos de precio, marcas y formatos. Además Bebemundo ofrece charlas con especialistas que te pueden ayudar a solventar dudas sobre la lactancia materna.

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2.-Escoge un extractor de leche
Existen varios tipos de extractores de leche en el mercado. El concepto y el consenso actual de los especialistas es que lo recomendable sería contar con más de un tipo de extractor de leche:

- Uno manual que puedas llevar siempre contigo y que no dependa del uso de electricidad o de baterías.

- Uno eléctrico simple.

- Uno eléctrico doble.

Cada uno de ellos tiene diferentes funciones y te será útil en diferentes contextos, dependiendo de si vas a extraer la leche en tu casa, o en un lugar donde no haya electricidad, o en tu trabajo, o de la cantidad de tiempo con el que cuentes.

Si es que tienes poco tiempo y necesitas extraer mucha leche rápidamente, lógicamente el extractor doble te resultará mucho más efectivo. Sin embargo, por su tamaño, te será más difícil llevarlo a todas partes. En ese caso te resultará más cómodo el extractor de leche simple, ya sea eléctrico o manual. Lógicamente, con el extractor de leche manual te tomará más tiempo extraer la cantidad de leche necesaria; pero podrás llevarlo más fácilmente a todas partes.

Hay personas que también creen que el extractor manual es más delicado con la anatomía de la madre. Dependerá de la experiencia de cada una.
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¿Cuál es la función del extractor de leche? La función del extractor de leche es extraer la leche que tu bebé no será capaz de succionar en ese momento, por uno u otro motivo. No es recomendable dejar que tus pechos permanezcan cargados de leche por demasiado tiempo sin que ésta tenga una vía de salida.

Te dejamos un video tutorial para que aprendas a usarlo:

Además, te resulta útil por si es que no puedes estar con tu bebé durante todo el día, sobre todo si eres una mamá trabajadora. En ese caso podrás extraer una cantidad de leche en la mañana y almacenarla para que tu pareja o la persona que quede a cargo de tu bebé por unas horas pueda darle tu leche con un biberón.

Algo que también debes tomar en cuenta es que no todos los extractores resultan compatibles con la forma de tus pezones o de tus pechos. Es por eso que lo ideal es empezar comprando un solo extractor de leche e incorporar dos o tres más, una vez que estés más familiarizada con lo que necesita tu cuerpo y tu bebé.

Podría ser que el extractor que compres en un inicio no te resulte tan útil y tengas que reemplazarlo por otro. Podría ser también que necesites tres o cuatro extractores diferentes que se adapten a tu estilo de vida. No te frustres si es que no encuentras el modelo perfecto para ti desde el inicio y mantente abierta a distintas opciones.

Lo importante es que te sientas cómoda y que puedas cumplir con los objetivos del extractor de leche: facilitar la alimentación de tu bebé a través de la lactancia materna.
Facilita tu lactancia materna
Ver opciones de formadores de pezón

3.-Evalúa el uso de pezoneras y formadores de pezones
Como dijimos más arriba, entre los distintos factores que te pueden ayudar a tener una lactancia exitosa está la forma de tu pezón.

En lo que respecta a lactancia materna, existen tres tipos diferentes de pezón:

- Pezón formado o protruido: es el pezón que sobresale unos milímetros de la areola y con el que es mucho más fácil el agarre para el bebé.

- Pezón plano: es el tipo de pezón que aunque responde al estímulo, difícilmente se distingue de la areola, por lo que dificulta el agarre para el bebé.

- Pezón invertido: Se conoce así al tipo de pezón que luce invertido hacia dentro de la areola.

Tanto el pezón plano como el pezón invertido representan un problema para el bebé al momento de realizar el agarre para tomar la leche del pecho de la madre. Para solucionar este problema existen los llamados formadores de pezón, que simulan la forma del pezón formado, de manera que se facilite el agarre para el bebé. Estos deben utilizarse bajo la supervisión de un médico pediatra y una especialista en lactancia materna.

En cuanto a las pezoneras, son pequeños artefactos similares a los formadores de pezón, pero su principal función es evitar que tu bebé lastime tus pezones, en caso de que tus primeros intentos de lactancia materna no resulten ser tan exitosos.
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4.- No te resistas al biberón, si lo necesitas úsalo:
Al inicio es posible que sientas que el biberón es tu némesis en el proceso de la lactancia materna. Hay bebés que al nacer no se acoplan rápidamente al pezón de mamá y se les enseña a tomar biberón, lo que puede condicionar una lactancia materna plena. Sin embargo, también es positivo que el bebé se familiarice con el biberón, dependiendo del estilo de vida que tengas, sobre todo si a los tres meses debes volver a tus actividades profesionales.Por otro lado, el uso del biberón puede resultar positivo, ya que puede ayudar al papá a disfrutar de la alimentación del bebé cuando lo alimente con tu leche materna.

Que el bebé esté dispuesto a hacer sus tomas de leche materna en un buen biberón, te ayudará mucho si debes ausentarte por trabajo o por otras causas, como una inocente salida al cine. Con la ayuda de un extractor puedes crear un buen banco de leche, para que el cuidador del bebé, durante tu ausencia, lo alimente con biberón. Tener una experiencia positiva lejos del pecho de mamá, sin duda te dará mucha tranquilidad. Pero el biberón tiene su ciencia y es gracias a ella que puedes ofrecerle a tu bebé todas las razones para que siga disfrutando de los beneficios de la leche materna. ¿Qué debes tomar en cuenta al elegir un biberón?

Al inicio, con un recién nacido, prefiere un biberón de flujo lento, que responderá a la limitada fuerza de succión de tu bebé. Una capacidad de 250 ml puede ser suficiente hasta los 4 meses. Después de los 3 meses puedes elegir un biberón de flujo medio. Su uso puede extenderse hasta el año de vida. Al año y medio, tu bebé ya necesitará un biberón de flujo rápido. Tomar en cuenta el tipo de flujo evitará atragantamientos y riesgos de asfixia.

Hoy los biberones, independientemente del tipo de flujo, cuentan con un diseño para evitar el exceso de aire. lo que evitará los temidos cólicos y dolores estomacales. Búscalos con etiquetas que digan “sistema anticólicos”. Estos diseños también previenen el reflujo y hasta infecciones de oído.

Hay biberones con tetinas de silicona que imitan el pezón de mamá. Muchas marcas se han fijado en ofrecer tetinas que favorecen el agarre natural y que hasta simulan la textura del pezón. Aprovecha estas ventajas para introducir suavemente a tu bebé en este nuevo momento de la lactancia materna. Para muchos bebés ese cambio no es fácil, ten paciencia.

5.- Abastécete con los básicos:
Además, del extractor de leche, pezoneras y formadores de pezones, necesitarás muchos otros implementos para tener una lactancia exitosa. Entre ellos se encuentran discos absorbentes o recolectores de leche, envases de almacenamiento, almohada de lactancia entre otros.

No dudes en acercarte a un asesor en bebemundo y pedirle que te guíe, en cuanto a todo el equipo disponible para lactancia materna. También puedes optar por comprar un kit de lactancia, que contiene la mayoría de estas cosas en un solo paquete.

6.-Relájate y deja que fluya
Finalmente, te aconsejamos enfrentarte a la lactancia desde la relajación y la confianza en que cada bebé es un mundo y, por lo tanto, cada mamá también. Esto quiere decir que podrías estar haciéndolo todo bien y aún así podrías no producir suficiente leche o no conseguir un buen agarre por parte de tu bebé, entre otras cosas. ¡No pasa nada!

Lo importante es que tengas claro que, si por algún motivo, te ves obligada a desistir de la lactancia materna como alimentación exclusiva de tu bebé, no tienes por qué angustiarte. Puedes optar por una alimentación mixta que combine leche materna con fórmula u optar exclusivamente por fórmula, si resulta ser lo mejor para ti (hay más opciones, aparte de la fórmula de leche de vaca). Es preferible que lo que escojas y seas capaz de hacer te haga sentir en paz y le transmitas esa calma a tu hijo o hija.
¡Quiero estar lista para la llegada de mi bebé!